Está claro que el periodismo está en una fase cambios que le vendrán muy bien para definir su modelo de negocio y su esencia como profesión. De hecho, algunos, en su incansable labor pública ya han dado sus primeros consejos para definir cómo debería ser el trabajo de un periodista.
"Los periodistas tienen 2 opciones: ayudar a crear confianza o hundir la confianza. Que piensen en la responsabilidad que tienen".
Estas palabras las firma Sergio Ramos Acosta (@sergioramospp). Son extraídas de un tweet que escribió tras la rueda de presa en la que Mariano Rajoy explicó cómo sería el rescate, las ayudas, o como se llame, que Europa va a realizar sobre España.
Debe ser que el señor Ramos Acosta, viendo el panorama y la lluvia de críticas que estaba cayendo en las Redes Sociales, pensó que el periodismo es algo que debe servir para un fin mayor que el de informar en libertad a ciudadanos libres. Ese matiz no termina de esencializarlo.
Por cierto, que nadie vaya buscando ese tweet, lo ha borrado. Dice que por insultos que ha recibido, y apela a la libertad de expresión. Sí, esa misma que el coarta diciendo que los periodistas son poco patriotas, esa misma.
Pero no acaba aquí el circo que se ha montado en torno a esta figura del Partido Popular. Al momento borró su BIO en la cuenta de Twitter en la que figuraba como "Consejero en Gabinete de la Presidencia de Gobierno de España". Solo él sabrá por qué lo hizo.
Vayamos resumiendo. Nos encontramos con uno de los episodos informativos más importante de los últimos 10 años (el rescate/ayuda), y teniendo la enorme batería de medios de comunicación que existen en la actualidad, sale a la palestra un señor a pedir, por favor, que todos escriban lo mismo, para no "hundir la confianza", claro está.
Pues eso, que si por algunos fuera, la mordaza tendría una gran funcionalidad con los periodistas. Eso, o cuentas la verdad revelada por el Gobierno. Simplemente patético que a estas alturas de la película haya quien crea que todavía se puede controlar los flujos informativos a merced de un poder corrupto que intenta por todo los medios lanzar un mensaje único. Da un poco de miedo que siga habiendo pensamientos así, sobre todo en un Gobierno que dijo hace tiempo que contaría siempre la verdad. Su verdad, y si no gusta, "ya procuraré que la contéis bien por mí", debe pensar.
El periodismo se desangra, y algunos planetamientos, como el de Sergio Ramos Acosta, son estocadas en el lomo de una profesión que debe no plegarse ante insinuaciones que perjudican el ejercicio libre de la profesión periodística.
"Los periodistas tienen 2 opciones: ayudar a crear confianza o hundir la confianza. Que piensen en la responsabilidad que tienen".
Estas palabras las firma Sergio Ramos Acosta (@sergioramospp). Son extraídas de un tweet que escribió tras la rueda de presa en la que Mariano Rajoy explicó cómo sería el rescate, las ayudas, o como se llame, que Europa va a realizar sobre España.
Debe ser que el señor Ramos Acosta, viendo el panorama y la lluvia de críticas que estaba cayendo en las Redes Sociales, pensó que el periodismo es algo que debe servir para un fin mayor que el de informar en libertad a ciudadanos libres. Ese matiz no termina de esencializarlo.
Por cierto, que nadie vaya buscando ese tweet, lo ha borrado. Dice que por insultos que ha recibido, y apela a la libertad de expresión. Sí, esa misma que el coarta diciendo que los periodistas son poco patriotas, esa misma.
He borrado mi ultimo tuit.Los insultos que estoy recibiendo por poner lo que opino es intolerante. Libertad de expresión solo para algunos.
— Sergio Ramos Acosta (@sergioramosPP) junio 10, 2012
Vayamos resumiendo. Nos encontramos con uno de los episodos informativos más importante de los últimos 10 años (el rescate/ayuda), y teniendo la enorme batería de medios de comunicación que existen en la actualidad, sale a la palestra un señor a pedir, por favor, que todos escriban lo mismo, para no "hundir la confianza", claro está.
Pues eso, que si por algunos fuera, la mordaza tendría una gran funcionalidad con los periodistas. Eso, o cuentas la verdad revelada por el Gobierno. Simplemente patético que a estas alturas de la película haya quien crea que todavía se puede controlar los flujos informativos a merced de un poder corrupto que intenta por todo los medios lanzar un mensaje único. Da un poco de miedo que siga habiendo pensamientos así, sobre todo en un Gobierno que dijo hace tiempo que contaría siempre la verdad. Su verdad, y si no gusta, "ya procuraré que la contéis bien por mí", debe pensar.
El periodismo se desangra, y algunos planetamientos, como el de Sergio Ramos Acosta, son estocadas en el lomo de una profesión que debe no plegarse ante insinuaciones que perjudican el ejercicio libre de la profesión periodística.
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