Seguramente muchas personas han regresado de sus vacaciones de Semana Santa sin saber que ha sido un periodo trágico en lo que se refiere a ese terrorismo silencioso y que de manera muy eufemística llamamos "Violencia de género" o más absurdamente "Violencia machista".Por desgracia, y aunque las crifras en estos casos resultan frías e indoloras, en lo que va de año se ha producido un aumento de mujeres asesinadas a manos de sus parejas.
La pregunta es, ¿hasta cuándo esta lacra?
Además hay otro dato que no ayuda a ser optimista con este tema, y es que el número de denuncias y peticiones de ayuda se ha visto reducido. Mal que me pese, en ocasiones lo puedo entender. Con un sistema judicial del que poco o nada se puede decir, al menos bueno, a uno siempre le queda la duda de creer que cualquier acción que haga no se verá recompensada.
Aquí es donde está la clave para el triunfo de estos asesinos mal nacidos. En la fuerza de creer y pensar que son intocables, que nada ni nadie les puede detener.
Por todo ello, una vez más, y sé que soy muy pesado, quiero insistir en esa famosa educación por la Igualdad, y por ende, por la Ciudadanía. Si no se educa en valores morales y éticos, en el concepto de que TODOS somo iguales, hombres y mujeres, muchas cosas no cambiarán.
Reformar la legislación o no, es una cuestión en la que no entraré, porque como muy bien contesta el ministro de Interior a algunas personas, legislar en caliente no es bueno. No obstante, algo hay que hacer.
Ante esas acciones concretas, me quedo con el detalle que brindó el cantante Huecco a todas esas mujeres que deben seguir luchando por demostrar que todos somos iguales. Hoy, ese trabajo le ha sido recompensado en forma de reconocimiento por la exquisita canción que compuso para alertar a la sociedad sobre este terrorismo silencioso.
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