Nos equivocamos...

Pese a que las informaciones son contradictorias, me da mucho miedo pensar que la negativa sea la cierta.

Dejar en el olvido a Rafael Alberti es tan zafio como endiosar al pelele de Cristiano Ronaldo. La vida no por absurda deja en ocasiones de ser injusta. Por desfortuna, no tengo claros recuerdos de la muerte del genio gaditano hace diez años, y eso que ya tenía una edad. Pero cosas de la vida, uno a veces no sabe apreciar lo que tiene.

Y eso es lo que por desgracia estamos haciendo con uno de los mayores genios de la literatura que ha dado este nuestro extraño país.

Hace ya tiempo pude ver un documental sobre la vida de Rafael Alberti, y fue precisamente ahí, cuando me entretuve en admirar al genio de El Puerto.

Marinero en tierra, hijo de una lugar distinto, que supo saborear los aires de una bahía mágica como la de Cádiz... reciba de alguien que no es nadie este pequeño homenaje.

SE EQUIVOCÓ LA PALOMA

Se equivocó la paloma.
Se equivocaba.

Por ir al Norte, fue al Sur.
Creyó que el trigo era agua.
Se equivocaba.

Creyó que el mar era el cielo;
que la noche la mañana.
Se equivocaba.

Que las estrellas eran rocío;
que la calor, la nevada.
Se equivocaba.

Que tu falda era tu blusa;
que tu corazón su casa.
Se equivocaba.

(Ella se durmió en la orilla.
Tú, en la cumbre de una rama.)

Rafael Alberti, (n. 1902)